Fuente de los delfines (Manacor)
Hay en Manacor un monumento que me inquieta y me sobrecoge. Sin saber por qué me trae a la memoria personajes de las novelas de H.P. Lovecraft. Se trata de una fuente de 1917, un conjunto escultórico compuesto por una peana cuadrada de unos 2,5m de altura, de piedra de marés, que sirve de base a cuatro peces de aspecto feroz situados cada uno en una esquina de dicha peana y apuntando, según he averiguado, a los distintos puntos cardinales. Los peces del monumento tienen las fauces abiertas y muestran hileras interminables de dientes Sus cabezas son desmesuradamente grandes, desproporcionadas con respecto a sus cuerpos que se unen ascendentes por las colas.
Font des dofins, plza de Sant Jaume, Manacor
La fuente conserva en uno de los costados la rueda de hierro que se empleaba para extraer el agua, mientras que en el lado opuesto se encuentra una pila alargada, que recuerda un abrevadero, con varios caños de agua verticales.
La construcción del monumento escultórico se remonta al año 1917, cuando el alcalde de Manacor puso en marcha un plan para dotar de agua las distintas barriadas de Manacor.
Los delfines parecen tener oculto un caño en las gargantas, puede que en un principio estuvieran diseñados para expulsar agua por sus bocas. Entre sus enormes cabezas se ven en los costados escudos de Manacor y en el costado de la rueda de hierro, el año de su construcción.
En uno de los laterales también podemos encontrar un recuadro sobre una portezuela de madera, con el nombre de la plaza, (plaza de San Jaime ) en español. El escultor que realizó el trabajo se llamaba Santandreu.