lunes, 25 de octubre de 2010

Octubre y los "Bunyols de patata"

Se hacen con patata hervida y triturada, harina, huevos, levadura... La receta también la dominan los jóvenes.










Cada año en otoño, cuando los días se acortan y el tiempo refresca, aparecen las buñoleras en algunas calles del pueblo con sus delantales blancos y la espumadera en la mano. Ponen su puesto de esta apetitosa repostería casera al caer la tarde, al amparo de alguna cochera abierta al público que pasa y se detiene a observar los buñuelos dorándese poco a poco en una gran paella llena de aceite de oliva. Después, una vez fritos, los van sacando de la inmensa sartén con una espumadera y los apilan en grandes cuencos de barro, los "ribelles". El olor que envuelve la escena es intenso, apetitoso, irresistible. Se venden aún calentitos, al peso, en bolsas de papel y para el que quiera, espolvoreados de azúcar. Les llaman buñuelos de"forat", porque llevan una agujero en el centro, o de las vírgenes"les Verges", día tradicional que se celebra el 21 de Octubre en Mallorca, costumbre de tiempos pasados en los que por esa fecha los chicos visitaban a la chica de sus ojos y le llevaban un clavel, y ella les obsequiaba con buñuelos de patata y una copa de hierbas. Me imagino que aquello acontecía bajo la atenta mirada de los padres de ella, que seguramente velaban para que la virginidad de la chica fuera preservada hasta el día del casamiento.